Un nuevo estudio integral israelí encontró que una cuarta dosis de una vacuna contra el COVID-19 triplica la protección contra enfermedades graves en personas de 60 años o más, en comparación con la protección ofrecida por tres dosis, según un estudio del Ministerio de Salud de Israel.
El estudio, publicado en el New England Journal of Medicine, fue realizado por el ministerio, tres importantes universidades israelíes y el Centro Médico Sheba, el hospital más grande de Israel.
Utilizando la base de datos del ministerio, los investigadores extrajeron datos de 1.252.331 personas mayores de 60 y elegibles para una cuarta dosis.
El estudio se realizó durante un período en el que predominaba la variante ómicron del SARS-CoV-2, entre el 10 de enero y el 2 de marzo de 2022.
Según el estudio, la tasa de casos verificados de COVID-19 entre las personas vacunadas con la cuarta dosis fue dos veces menor que la del grupo de tres dosis, pero la protección contra la infección confirmada pareció ser de corta duración.
Estos son apartes del documento divulgado por el ministerio de Salud israelí:
ANTECEDENTES
El 2 de enero de 2022, Israel comenzó a administrar una cuarta dosis de la vacuna BNT162b2 a personas de 60 años o más. Se necesitan datos sobre el efecto de la cuarta dosis en las tasas de infección por coronavirus 2 (SARS-CoV-2) del síndrome respiratorio agudo severo confirmado y de enfermedad grave por coronavirus 2019 (Covid-19).
MÉTODOS
Usando la base de datos del Ministerio de Salud de Israel, extrajimos datos sobre 1,252,331 personas que tenían 60 años de edad o más y eran elegibles para la cuarta dosis durante un período en el que la variante B.1.1.529 (omicron) de SARS-CoV-2 fue predominante (del 10 de enero al 2 de marzo de 2022). Estimamos la tasa de infección confirmada y Covid-19 grave en función del tiempo a partir de los 8 días posteriores a la recepción de una cuarta dosis (grupos de cuatro dosis) en comparación con la de las personas que habían recibido solo tres dosis (grupo de tres dosis). ) y entre las personas que habían recibido una cuarta dosis de 3 a 7 días antes (grupo de control interno). Para la estimación de las tasas se utilizó una regresión cuasi-Poisson con ajuste por edad, sexo, grupo demográfico y día calendario.
RESULTADOS
El número de casos graves de Covid-19 por 100.000 días-persona (tasa no ajustada) fue de 1,5 en los grupos agregados de cuatro dosis, 3,9 en el grupo de tres dosis y 4,2 en el grupo de control interno. En el análisis cuasi-Poisson, la tasa ajustada de covid-19 grave en la cuarta semana después de recibir la cuarta dosis fue más baja que la del grupo de tres dosis por un factor de 3,5 (intervalo de confianza [IC] del 95 %, 2,7 a 4,6) y fue inferior al del grupo de control interno por un factor de 2,3 (IC del 95 %, 1,7 a 3,3). La protección contra enfermedades graves no disminuyó durante las 6 semanas posteriores a la recepción de la cuarta dosis. El número de casos de infección confirmada por 100 000 días-persona (tasa no ajustada) fue de 177 en los grupos agregados de cuatro dosis, 361 en el grupo de tres dosis y 388 en el grupo de control interno. En el análisis cuasi-Poisson, la tasa ajustada de infección confirmada en la cuarta semana después de recibir la cuarta dosis fue inferior a la del grupo de tres dosis por un factor de 2,0 (IC del 95 %, 1,9 a 2,1) y fue inferior a la del grupo de control interno por un factor de 1,8 (IC del 95 %, 1,7 a 1,9). Sin embargo, esta protección se desvaneció en las últimas semanas.
CONCLUSIONES
Las tasas de infección confirmada por SARS-CoV-2 y Covid-19 grave fueron más bajas después de una cuarta dosis de la vacuna BNT162b2 que después de solo tres dosis. La protección contra la infección confirmada pareció ser de corta duración, mientras que la protección contra la enfermedad grave no disminuyó durante el período de estudio.
