Interventor en Repelón quiere pavimentación, pero sin canalización

Un problema de fuerte impacto en el municipio de Repelón, tiene hoy “parados sobre el arroyo” literalmente a los vecinos de la calle Cartagena principal y todo por una obra de pavimentación que se les aproxima, pero sin canalizar el tramo.

De acuerdo al testimonio entregado por Edgar Pernett, un vecino de la comunidad, “éste es un mal que lleva con nosotros más de 50 años y es el arroyo de la Calle Cartagena, el mismo que cuando llueve causas graves inundaciones en la zona, sin que hasta la presente, las administraciones municipales y gubernamentales intervengan seriamente”.

Según el vocero de este largo tramo de Repelón, son varios los intentos de acercamiento que han tenido con la dirigencia política del Municipio y ninguno ha surtido efecto, para mitigar esta dificultad.

“En el 2020 nos sentamos (la comunidad) con los dirigentes políticos locales y allí manifestaron que lo mejor era la pavimentación y nosotros no nos oponemos a esa obra, pero si queremos es una verdadera solución y es la canalización o el desvío del arroyo, sin que traiga mayores complicaciones cuando llegue el invierno”, explicó Pernett.

Pese a los pedidos hechos por la comunidad, el proyecto sigue su ruta y lo que más le molesta a los afectados en esta calle, es que el mismo no fue socializado con los directos interesados, simplemente de manera dictatorial se ha procedido con la obra.

“Hoy lo que los medios pueden ver en mejor estado, es porque nosotros mismos, hemos hecho un trabajo de conciencia con nuestros vecinos, dándole buen manejo al consumo y vertimiento de sus aguas hacia la calle, así como las que fluyen de la planta de tratamiento del acueducto, la limpieza de los manjoles que nos rodean, pero eso sólo son pequeñas cosas que podemos hacer nosotros mismos”, recalcó el líder social.

Pernett señaló que ayer tenían dispuesto una reunión con el alcalde de la población, Wilfrido García Muñoz, acercamiento en la que la comunidad sólo espera que la obra tome un nuevo rumbo y antes que la placa de cemento, las aguas del arroyo logren tener un buen cauce y frenar así las inundaciones que por años han causado serios estragos en su entorno.