Así sería el tiburón que merodea las aguas de San Andrés, y así están sus playas

El cuerpo del tiburón tigre es azulado o verdoso con el vientre color blanco o amarillo claro y con rayas verticales similares a las de los tigres; de ahí su nombre. En los ejemplares jóvenes dichas rayas son más notorias que en los adultos, pues a medida que crecen se van desvaneciendo poco a poco.

Es una especie que se encuentra en aguas tropicales y subtropicales de todo el mundo con excepción de los polos.

En el Atlántico oeste está presente en el Caribe, el Golfo de México, las Bahamas, y en general desde Massachusetts, Estados Unidos, hasta Uruguay en Sudamérica.

En el Pacífico este se encuentra en las islas Canarias, el Mediterráneo, Islandia, Reino Unido y Senegal (África). También se le ve en el océano Índico y en el oeste del océano Pacífico, en países como Japón, Indonesia, Australia, Nueva Zelanda, Hawái, Haití y las islas Galápagos.

La mayoría de los tiburones de Tiger Beach están acostumbrados a los buceadores, a que los alimenten y a no morder la mano que les da de comer. Pero incluso los que no están habituados a esa rutina, por lo general no representan un peligro para los buzos.

El tiburón tigre es un depredador al acecho que se vale del sigilo y del factor sorpresa para atrapar a sus presas. En Tiger Beach nadie nada o rema por la superficie sin pensar, como sucede con la mayoría de las víctimas de un ataque. Aquí desciendes a la profundidad del tiburón, te sitúas a su nivel y te presentas como algo distinto a una presa. Eso hace que bucear con ellos sea razonablemente seguro.

ALIMENTACIÓN:

Como pez carnívoro, su alimentación se basa en presas marinas entre las que se incluyen tortugas, crustáceos, moluscos, aves y mamíferos. En ocasiones también come otros tiburones tigre.

Conviene recalcar que el tiburón tigre no es importante solo por la cantidad de personas a las que llega a morder. Como superdepredador que es, actúa como una fuerza equilibradora que resulta crucial para los ecosistemas oceánicos, ya que mantiene a raya la conducta de animales como las tortugas marinas. Es esencial para la salud de las praderas submarinas, hábitat de una amplia variedad de formas de vida.

Es un animal sumamente sigiloso y posee capacidad para captar las ondas de presión de baja frecuencia, lo que le ayuda detectar presas hasta en aguas turbias. Esto, junto con su excelente visión y fino sentido del olfato, lo convierte en un poderoso depredador.

Con información e imágenes de NatGeo y BioEnciclopedia.